Ellos también jugaron.
El partido tuvo mucho de Pellicer.
La primera parte fue una calca del legendario estado de forma malaguista.
Después se convirtió en una mala copia del western de los hermanos Marx.
Los malaguistas quemaban madera del tren hasta quedarse en el chasis.
El ridículo fue monumento en la Rosaleda.
Los goles del Mirandés, con datos ridículos en segunda división, dinamitando el juego malaguista.
En el siguiente acto, con el partido acabado, el que provocó un gol rival, sentencia el partido a favor del Málaga.
Juanfran Funes en la comparecencia, imitando a Pelli:
- Los malaguistas tenemos que multiplicar y no dividir.
No comparece ningún miembro del cuerpo técnico.
Ninguno van a explicar por qué cobrando lo que cobran, los jugadores tienen una capacidad física mediocre.
De todas formas, si comparecieran, los medios les darían un buen masaje gratis.
Menos mal que el Mirandés es colista, todavía no tocan los grandes.
En la vuelta de la liga Hipertensiones nadie regalará nada.
Visto lo visto, Funes sabe coger la pizarra y hacer dibujitos de colegio.
No ganó el Mirandés porque no quiso.
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