La UD Almería de Rubi siempre me ha parecido un equipo con poco fútbol además de estar muy mal entrenado.
El Málaga CF se jugaba en la Rosaleda ser más malo que el Almería perdiendo, o mejor que el Almería ganando.
No ha cambiado nada.
La liga Hipertensiones se trata de esto.
De no ser más malos que los equipos malos.
Funes necesita escapar del cúmulo de hipertensiones que se manifiestan cuando se pierde con equipos malísimos.
De la Rosaleda no debería escapar ningún equipo llevándose ningún empate.
Empatar en casa o a domicilio siempre es una derrota.
Esas derrotas son esos partidos de los que te acuerdas a final de temporada.
El Almería solo es uno de esos equipos que asustan mucho, pero da tantas de cal como de arena.
Arriba en la clasificación se sitúan los equipos malos menos malos.
A continuación todos los equipos más malos que malos.
No hay más que ver que no existe ningún equipo dominante en el liderato.
Se van cambiando constantemente semana tras semana según cogen impulsos descontrolados.
No hay mejores equipos en segunda división.
Al líder durante un par de semanas le da por perder tres partidos seguidos y ni los técnicos saben cómo ha sido.
Al Málaga CF ni siquiera debería forzar la marcha para colocarse en buena posición.
Los equipos más malos que malos irán quemándose solos y se volverán inoperantes.
Lo único que tiene que hacer el Málaga CF es mantener la racha con control sin desesperarse.
Evitar los empates y ganar los partidos.
Por cierto, preciso bombeo del balón para colocar el segundo gol en la portería rival.
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