Málaga CF: A ver si acaba ya la temporada

Estoy loquito por ver que ha terminado la temporada más nefasta que se recuerda en los últimos años.

Por mucho vendedor de humo que se publicite cada día en redes sociales como Star Influencer sin tener pajolera idea de deporte de alto nivel, lo único cierto es lo que he venido diciendo siempre, que para ser creíble el Málaga CF tenía que haber arrasado de cabo a rabo en 1°RFEF.

Sin embargo, algunos aficionados que venden bien su imagen, se empeñan en vendernos el bodrio de campaña como la mejor temporada posible. 

Esperpento por un tubo marcado por la forzosa necesidad de ascender, animado por un grupo de técnicos incompetentes que se han apropiado del banquillo malaguista.

Lo peor es el grupo de Influencers que publican en redes sociales sus desvaríos propios de merdellones. Los mismos que aplacan a las tribus malaguistas para que depongan de su derecho a quejarse como cliente y aficionado.

Los mismos que son invitados a los medios por sus amiguetes para imponer una versión de anómala cual sacerdote televisivo controlando a los feligreses.

El objetivo de éstos oradores es denigrar a los lobos esteparios que piensan y ven con claridad que un equipo profesional bien entrenado, nunca debería pasar por los gravísimos trances por los que pasa el Málaga CF y antes pasó el CD Málaga.

El club de La Rosaleda ha sido, es y será la diana escapatoria de las pandillas de incompetentes técnicos inútiles que de otra forma nunca ganarían dinerales en el mundo del fútbol.

Por eso vienen al Málaga CF a forrarse aunque el equipo estuviese en Cuarta División. Y sin la inestimable ayuda de influenciadores orando por ellos, no existirían muchos malaguistas que se creen más malaguistas porque compran más camisetas que nadie.

Y así todo hasta que la verdad les da un toque y los créditos se tambalean. Creerse que un jugador de fútbol de tercera es una súper estrella, dice mucho de un Málaga CF incapaz de pasar por encima de los clubes de la categoría aficionados. 

Sabed que el mismo técnico que con veintiún partidos de margen fue incapaz de salvar los cuatro puntos de descenso, podría devolver al Málaga CF a Segunda División y del mismo modo volver a descenderlo Primera Federación. 

Lo peor es que los influencers sacarán provecho igualmente. 

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Málaga CF, el psiquiátrico donde más fraudes saben de fútbol

Increíble lo que tienen montado con el bodrio facilón del Kanka, un músico de música pachanga. Algo que sabe hacer el Cortijo es dar circo a aficionados y simpatizantes. Pura política cínica y pedante. Se entiende que los políticos están dentro de lo que pasa en los tejemanejes del club.

Lo mejor de la jornada pasada, sucedió en la isla de San Fernando. Otro empate, esta vez contra el San Fernando CF, gracias a la intervención del portero del Málaga cabeceando un saque de corner que pegó en la cabeza de un contrario para ir al fondo de la red.

Tras el partido hubo supuestas informaciones del técnico Pellicer, quejándose de que lo tienen vendido. Puro circo en división aficionados.

Graciosillo el hombre. Seguro que no cobra un sueldo de 1.000€ por la chatarra que mete en el Málaga. Cobra un pastón como técnico sobrevalorado que no tiene ni puñetera idea de alta capacidad orgánica. 

Muchos como él viven del supuesto deporte rey, sin conocimientos sobre alta capacidad física, que al final de temporada será premiado con un finiquito con cifras de varios ceros que ni en sueños cobrará cualquier experto trabajador. 

 

Esas cantidades no la ganan el 85% de los aficionados malaguistas. Nunca entenderé por qué se paga tanto dinero en el fútbol por jugadores, preparadores físicos y entrenadores que no pasan de categoría pacotilla. 

En atletismo, donde militan verdaderos atletas, a los entrenadores se les ve enseguida lo que les pesa el culo. Los caguetas de medio pelo no venden en el running lo que venden en el fútbol. 

En atletismo se ve enseguida que el 85% de los entrenadores son enchufados de poca monta pero ninguno lo esconde. Y ninguno cobra cantidades obscenas como en el fútbol.

Un compañero en X Twitter es un pequeño accionista que lleva años quejándose de la trayectoria deportiva del club. Quiere que se arreglen los problemas ejecutivos y deportivos del Málaga CF. Está muy hastiado de tantos entrenadores chatarreros.

Yo le digo, que siguiendo la trayectoria del CD Málaga desde su fundación hasta su desaparición, nunca se arreglarán los problemas que supuestamente ha heredado el Málaga CF, por razones obvias. No son pocos los aficionados que conocen de primera mano lo que ocurre en el club. 

Es mejor no hacer caso de un montón de cretinos. Es muy sano para la cordura. El único deporte con nivel que han hecho en su vida es ir del sillón al bar y del bar al sillón. Sobretodo cuando la parienta les saca malas pulgas y no los deja pulular por casa.

El Cortijo del Málaga CF vive del cuento de un club que ya no existe. De ahí el circo, el teatro y las celebraciones. El cuento da dividendos pero no paga a los acreedores del CD Málaga que se quedaron sin cobrar.

Mucho cambiarían sus caras si los acreedores se plantaran a las puertas de la Rosaleda exigiendo al hermoso heredero cobrar. Supongo que incluirían el tanto por ciento por los atrasos de varias décadas. Más o menos en la misma manera que tu banco exige que le pagues hasta el último céntimo.

A los ejecutivos y entrenadores del Málaga les pasa lo que a los conductores que se sacan el carnet de conducir. Creen que van a pilotar un Formula 1 acaban conduciendo una chatarra cuatro latas moderno.

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Lo del Málaga CF trasciende el espacio-tiempo sobre el horizonte de sucesos

Recuerdo siendo niño al CD Málaga, como equipo de segunda división, dando siempre una de cal y tres de arena, a pesar de las innumerables estrellas del fútbol que han pasado por su historia. 

La primera vez que entré en el viejo recinto de La Rosaleda, vi un equipo peleón tan duro y frío como las gradas de la zona alta donde me senté, a pesar de que la mayor parte estaban vacías.

La joya de aquel CD Málaga era un tal Migueli, un jugador que no sabía por qué corría de una forma extraña, curvando el cuerpo hacia adelante, dejando una joroba de camello en la espalda y bajando considerablemente la cabeza.

Corría por el lateral hasta llegar justo a la esquina donde me encontraba, para centrar al área con poca efectividad y recursos. Cuando se cansó, ya no le valía mucho correr por el extremo y se quedaba rezagado en aquel pésimo encuentro de segunda división contra el Almería, un partido que no podía ser más malo y feo que los de ahora.

Y yo, que me había pasado la niñez coleccionando cromos de ídolos de primera y segunda división, me quedé de piedra observando lo malos que son jugando al fútbol algunos de mis ídolos de la infancia. 

Cualquier partido que yo hubiese jugado en mi posición habitual de delantero centro, tenía muchos más alicientes y belleza futbolística que el juego de aquellos futbolistas de La Rosaleda jugando un derbi tan malo, que solamente se escuchaban insultos porque los balones pasaban a diez metros de la portería. 

Aquel partido acabó con empate a un gol. Lo único trascendente es que alguien le chivó a mi padre que iría a verlo y me lo encontré allí. Y aunque se  sentó aparte, no me quitaba ojo. Se colocó cerca y me mandó callar cuando grité consignas.

Ya hace algunas décadas que fui por primera vez a La Rosaleda. A principios de los 70 del siglo pasado. Y los técnicos del Málaga siguen siendo tan patateros como entonces, lo mismo digo de los preparadores físicos.

Nunca he entendido por qué ganan tanto dinero en el fútbol. Los dirigentes técnicos son casi todos unos fracasados carentes de conocimientos. Siempre he tenido la certeza que son los chupasangres de los clubes que no justifican sus ingresos, ni se diferencian en nada de cualquier profesor de educación física de cualquier escuela o instituto.

El mundo del fútbol se mueve gracias a personas anónimas, como en las artes y en las ciencias, creando escuela en el deporte de competición. Pero en el Málaga no existen este tipo de personas.

No entiendo por qué un cuerpo técnico de fútbol tan malo con un juego tan ramplón, cobra cantidades desorbitadas en un equipo que milita en la tercera división.

Los dirigentes ejecutivos y deportivos del Málaga siempre han sido individuos carentes de conocimientos y cultura de competición. Lo único que han traído al club es ruina y técnicos con mucho músculo y pocas nociones competitivas. No son nada raras que las cagadas y los descensos de categoría se confirmen en cada generación.

El Málaga siempre ha sido una gran estrella saqueada en sus recursos combustibles, expuesta a explotar como supernova para que colapse y se transforme en un objeto súper compacto, un agujero negro que trasciende el espacio-tiempo estirándose a velocidad de vértigo sobre el horizonte de sucesos.

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